Lo que viene


¿SERÁ BUENO EL CAMBIO?
Nunca como ahora había estado tan jodido el Estado de Morelos. Políticamente, socialmente, económicamente, moralmente, los morelenses estamos peor que cualquiera de los fines de sexenio que se recuerden. Lo que viene hace abrigar esperanzas, aunque la verdad sea dicha ¡no muchas!


EL QUE VIENE, EL FAMOSO CUAU
Recibirá un Estado de Morelos hecho trizas. Con una deuda de casi 15 mil millones de pesos. Con un clima de violencia creciente. Un promedio de ejecuciones que crispa los nervios, además de un número creciente de atracos, tanto a particulares como a empresarios. Hace unos días, un asalto bancario a plena luz del día, a unos metros del Palacio de Gobierno en el centro de la capital morelense.


EL QUE YA CASI SE VA, GRACO
Se burló de los morelenses desde que llegó a la silla principal del gobierno estatal. Sus promesas de campaña, las cambió por negocios a diestra y siniestra, así como por otorgar prebendas a sus colaboradores, pero en especial a sus familiares y amigos, quienes impunemente metieron mano a las arcas del gobierno, solapados por el mismísimo titular del Poder Ejecutivo. Reparar o tratar de reparar los daños causados por Graco y sus secuaces, costará mucho esfuerzo, y años.


POR ESO, A PESAR DE QUE
Hay confianza en lo que viene, se ve difícil que de buenas a primeras se observe un cambio. Muchos de los que sufragaron por el rementado Cuau, consideran que el que fuera presidente municipal de Cuernavaca, puede lograrlo. Sin embargo, no va a ser tarea fácil, ni mucho menos rápida. Eso sí, deberá responder a las expectativas de la población.


EN LOS ÚLTIMOS DÍAS
Han circulado versiones que buscan desestabilizar aún más a la entidad. Insistimos, nunca como ahora había estado en estas condiciones Morelos, como en las que se encuentra ahora, en la última semana de la gestión tan maldecida del tabasqueño Graco Ramírez. Aunque, como dicen otros, lo bueno es que ya va a terminar la pesadilla de este sexenio.


PERO, COMO TAMBIÉN SOBRAN
Los que afirman que posiblemente llegue otra peor. Para empezar, siguen los jaloneos por la capital de Morelos, la otrora Ciudad de la Eterna Primavera, Cuernavaca. En la actualidad, la imagen de la capital morelense, es deplorable. Baches por todas las calles, que se han ahondado más en esta época de lluvias. Basura por doquier. Desorden y caos por el aumento desmedido del comercio ambulante.


UNO DE LOS PROBLEMAS
Más graves que deberá afrontar la administración que encabezará Cuauhtémoc Blanco Bravo, a partir del lunes 1 de octubre en que tome posesión como gobernador será sin lugar a dudas, el del transporte colectivo. El gobierno graquista envolvió a los transportistas con muchas promesas, y dejó un desgarriate que será difícil de resolver.


HAY UN JUEGO MUCHO BILLETE
Además de los consabidos intereses de decenas de permisionarios, quienes creyeron en las promesas de Graco y su gente. Ahora, a quien le reclamarán es a Cuauhtémoc, quien ni vela tiene en este entierro, como dicen coloquialmente. Sin embargo, ese es el panorama. Además de triste ¡muy preocupante! Afecta a miles de morelenses. Manos perversas los envolvieron, y la bronca estallará pronto.


LA INSEGURIDAD ES OTRO PROBLEMA
Muy lacerante. ¿Se acuerdan que Graco prometió terminar con la inseguridad en 18 meses? Bueno, pues pasó el sexenio completito, y todo quedó en fintas y promesas. La situación en este renglón, está peor que antes. Y el comisionado de seguridad, Alberto Capella, con la mano en la cintura, tranquilamente, le dijo a su patrón Graco Ramírez que ya se iba ¡y muy orondo se largó!


LA HERENCIA DEL TABASQUEÑO
Es pavorosa. Deja también una Universidad sumida en la peor crisis de la historia. Aparte, en huelga. Miles de estudiantes en peligro de perder el semestre. Catedráticos molestos con el gobierno por la desatención mostrada. Jubilados cansados de tantas burlas de Graco. Un rector que resultó engañado por el mismo gobernador, y que desde hace meses espera los millones que ofreció el tabasqueño para rescatar financieramente a la UAEM.


MÁS CRÍMENES CONTRA PERIODISTAS
El pasado fin de semana, en Chiapas, fue ejecutado otro periodista. Ahora le tocó a Mario Gómez, en Yajalón. En las inmediaciones de su domicilio particular, fue atacado por dos sujetos que viajaban a bordo de una motocicleta, quienes le dispararon a quemarropa. El que fuera corresponsal de El Heraldo de Chiapas, falleció a consecuencia de este artero ataque. Ya suman 9 los periodistas asesinados en lo que va de este 2018.
La frase de hoy: La inocencia no encuentra protección en la culpabilidad.
Hasta el viernes con más TECLAZOS POLÍTICOS.